Saturday, September 02, 2006

 

El Arte: El Fúsil de la Revolución Social Moderna

Enfocándose en los atropellos y discriminación recibidos por lo inmigrantes residiendo en Estados Unidos desde la iniciativa HR 4437, leyes que criminalizan a cualquier inmigrante indocumentado o a cualquiera ayudándole u otorgándole cualquier tipo de asistencia, un grupo de jóvenes denominados Ollin Imaginación llevó a cabo este 4 de junio del 2006 un Festival de Baile con el propósito de hacer un fuerte llamado al gobierno Estadounidense a poner un alto a esta injusticia. Este evento anual, conocido como el Festival de Baile por la Paz, ya es el segundo que presencia la ciudad de Nueva York, y tiene como principal objetivo protestar los efectos de la actual guerra en Irak en las comunidades pobres e inmigrantes de Estados Unidos.

Este año, uno de los grandes efectos de esta guerra ha sido el ataque a las comunidades inmigrantes, que con el perjurio a la libertad y seguridad de nuestros pueblos utiliza la idea de hacer prevalecer estas dos como excusa para irse en contra de personas inocentes, honestas, y trabajadoras. Ollin Imaginación también tomó esta oportunidad para protestar otro de los grandes efectos de esta guerra: el agresivo reclutamiento militar de los jóvenes Latinoamericanos y Afro-americanos, siendo estos dos los grupos raciales más reclutados en Estados Unidos para ir al frente de guerra. Hasta ahora, más de 526 Latinoamericanos y Afro-americanos han muerto desde el inicio de la guerra (www.icasualties.org/oif). Esto equivale a más del 21 por ciento de soldados perecidos, número alto considerando que estos dos grupos étnicos todavía son una minoría en la población de este país. A pesar de servir lealmente a este país, cientos de Latinos y Afro-americanos han perdido la vida desde el inicio de esta guerra, mas cientos de inmigrantes han sido victimas de deportaciones, arrestos, crímenes raciales, entre otras formas de discriminación.

Conocida como una de las áreas más multiculturales del mundo, el Parque de Flushing Meadows en Corona, Queens, fue testigo de este Festival de Baile el cual atrajo a más de 300 personas, en su mayoría inmigrantes de Latinoamérica. Frecuentado por muchos inmigrantes Latinos, el parque se caracteriza por tener un aire bien Latinoamericano. Las amplias canchas de fútbol llenas de compatriotas usando sus camisas deportivas respectivas a su país de origen, sus familias, cientos de jóvenes, y hasta las carretas de comida típica, toman posesión de este parque especialmente en los calurosos fines de semana que ya azotan la ciudad de Nueva York. El evento, queriendo atraer a inmigrantes del área de Queens, presentó a más de 10 grupos de bailes folklóricos de diferentes partes de Latinoamérica y del mundo, al igual que poetas, músicos e importantes líderes del movimiento anti-guerra y pro-derechos de los inmigrantes. Iván Medina, inmigrante Mexicano y soldado veterano de Irak, que también perdió a su hermano gemelo en esta guerra, hizo un llamado a los jóvenes inmigrantes a no dejarse engañar por los reclutadores militares. Comentó Medina que los reclutadores atraen a los jóvenes inmigrantes con falsas promesas, entre ellas la tan codiciada ciudadanía. La ciudadanía, la cual le fue prometida a Medina al unirse a las fuerzas armadas, todavía no la ha recibido.

Con el slogan: “Construyendo una cultura de paz, respeto y justicia social por medio del arte y la educación”, Ollin Imaginación busca una alternativa a la destrucción moral y física que ha ocasionado el gobierno Estadounidense a los grupos que ha utilizado para construir su poderosa economía, siendo éstos esclavos e inmigrantes. El colectivo, liderado por madres, padres, educadores, artistas, e inmigrantes, presenta primero que nada una alternativa de curación por medio del arte a la gente que ha sido ultrajada y violentada por los monstruos sociales del racismo, machismo, homofobia, pobreza, entre otras formas de discriminación y explotación. El arte, en cualquier representación, es medicina para la mente, cuerpo y alma, y también un arma para crear belleza en vez de destrucción. Por medio de la expresión artística y creativa, estos grupos pueden desahogarse, pueden adquirir una voz en contra de las injusticias sufridas y especialmente, reconocimiento en esta sociedad que los ha marginado por generaciones. Ollin, palabra en Náhuatl que significa movimiento, hace un llamado a construir un movimiento de justicia social en donde sea nuestra imaginación la que de nacimiento ha soluciones nuevas basadas en las necesidades y realidades de la gente oprimida de este país. En esta ocasión, el baile y la danza folklórica fue el fúsil artístico para expresarse en estos tiempos de revolución cultural. Entre bailes, poesía, música protesta, y mensajes de paz demandando justicia y dignidad humana, la multitud se educó, divirtió y protestó las injusticias cometidas por el gobierno de Estados Unidos.

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